Subida Juncalillo | Todo para Monzón

Con fuerzas renovadas, Luis Monzón demostraba que todavía está en forma y ganaba con total autoridad la XXI Subida a Juncalillo a sus compañeros del equipo Auto Laca, gracias a un MINI JCW en su versión WRC que funcionó a la perfección.

Todos los pilotos no dejaban de mirar el cielo para vislumbrar que es lo que pasaría en la prueba, pero aunque con unas temperaturas realmente bajas, no llegó a llover en Juncalillo, algo que todos esperaban y que ya se había hecho norma en las ediciones anteriores.

La convocatoria de la Escudería Drago, no tuvo mucho éxito en cuanto a cantidad se refiere, pero la presencia del equipo Auto Laca, con tres pilotos y dos coches, hicieron que la rampa norteña se llenara de aficionados ávidos de ver quién ganaría entre los hombres de Ángel Ramos (Gerente de Auto Laca)

Con un asfalto seco, aunque algo frio, los neumáticos iban a ser vitales y eso Monzón lo sabía. Por ello opto por una monta de neumáticos muy especial. El MINI montó en las cuatro ruedas unos neumáticos Sliks (completamente lisos) de la marca Avon (especialista en este tipo de pruebas) aunque sólo tenía un juego.

Ya en carrera, Monzón marcó su ritmo desde la manga de entrenamiento y fue ganando cada una de las mangas mejorando los tiempos como una máquina bien afinada, sólo se le escaba bajar los tiempos en la tercera y última, pero los neumáticos ya no podían más.

Justo por detrás de Luis, estaban sus dos compañeros de Auto Laca, el grancanario Armide Martín y el lanzaroteño Yeray Lemes, ambos con sendos Porsche, pero de diferentes preparaciones y años.

Las diferencias en el cronometro eran mínimas, pero Armide hacía valer la potencia de su coche sobre el de Yeray, algo más veterano y con una suspensión diferente. También ambos pilotos se quedaban sin neumáticos en la tercera y última manga y aunque Yeray le ganaba a Armide, su mejor tiempo en la primera manga oficial le hacían ser segundo.

Lemes se mostraba tranquilo y consciente de la dificulta que era la de luchar con vehículos superiores, pero lo hizo muy bien demostrando que el Porsche es un coche valido en Canarias y sobre todo llevándolo a la meta sin ningún incidente.

Después de los integrantes del equipo Auto Laca, y a más de 10 segundos del vencedor, Juan Luis Santana iba de menos a más y lograba una meritoria cuarta plaza de la general con su Mitsubishi Evo VII de grupo A que estrenaba para esta ocasión.

En su vuelta a la competición tras unos meses inactivos en la provincia de Las Palmas, Pepe Juan Torres deleitaba a los aficionados con la espectacular conducción de su BMW M3 y ganando de paso el grupo T.

El piloto norteño Víctor Mendoza se quedaba en tierra de nadie con su Mitsubishi Evo IV de grupo A, dando paso al único vehículo en la categoría de históricos, un Ford Escort MK2 en manos de Tato Suárez, este vehículo estrenaba nuevo motor.

Coche 0

Excepcionalmente el coche “0” de la XXI Subida a Juncalillo era un Hyundai Ioniq, un coche híbrido, que podría ser la primera vez que un vehículo de estas característica ejerce de vehículo de seguridad. A sus mando estaba Toñi Ponce y según hemos podido saber es un proyecto de futuro que llevaría a este vehículo a la competición.

Regularidad Sport

Dentro de la prueba también había espacio para los vehículos de Regularidad Sport, no en vano la vuelta a la vida de la Subida a Juncalillo los clásicos siempre fueron protagonistas.

Comenzando por los más rápidos, Manuel Hernández y David Bethencourt vencían con su Renault 5 Turbo 2 en el Campeonato RS, con susto incluido que casi dejan mal parada a su joya automovilística. En el apartado de Copa RS, Roberto y Tania García (padre e hija) se imponían con el afinado Honda Civic. Y finalmente, en la categoría Trofeo 50, Carlos y Calixto Miranda ganaban con el VW Golf GTI de segunda generación.

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