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Mazda3

Mazda3, un coche para el cliente

La firma nipona ha creado la cuarta generación del Mazda3, pensado sólo en lo que sus clientes le han pedido.

13/01/2020 - Fotos: José González

Mazda3, un coche para el cliente

Mazda busca crear un vínculo a largo plazo con sus clientes basado en una profunda conexión emocional. Para Mazda, un coche no debe ser solo un medio de locomoción. Debe existir una sensación de fusión entre el coche y el conductor en la que cualquier interacción resulte natural e intuitiva. Este planteamiento centrado en el ser humano ha encontrado su máxima expresión en el nuevo Mazda3.

Mazda3, un coche para el cliente

En el nuevo Mazda3, todo está ingeniosamente diseñado para producir emoción y alegría en el conductor, en toda clase de circunstancias. La evolución del lenguaje de diseño Kodo que ha adoptado el nuevo Mazda3 hunde sus raíces en la esencia de la estética japonesa y se libera de todo lo superfluo. El coche emana serenidad, confort y lujo tanto en su diseño exterior como en el interior.

El diseño del Mazda3, con carrocería de cinco puertas, se ha centrado en actualizar totalmente el modelo, sin perder las virtudes de generaciones anteriores. Además, ofrecer una línea atractiva y seductora que transmite deportividad y a la misma vez elegancia.

Mazda3, un coche para el cliente

Cuando se ve desde la parte trasera, el nuevo Mazda3 tiene una presencia muy poderosa. Destaca, principalmente, la caída del techo hacia la sección trasera, cuyo portón del maletero parece fundirse en una única pieza.

Además, es el primer modelo comercial que cuenta con algunas de las tecnologías con las que se materializará esa visión a largo plazo “Zoom-Zoom sostenible 2030” de Mazda. Esta estrategia tiene en cuenta las emisiones de carbono desde la extracción al consumo y busca ofrecer una sostenibilidad ambiental real, sin renunciar a unas prestaciones de conducción sobresalientes. La introducción del revolucionario motor de gasolina Skyactiv-X de Mazda es un paso importante en esa dirección. El nuevo Mazda3 será el primer modelo de producción en el que se utilizará este motor.

Mazda3, un coche para el cliente

Mazda ha desarrollado una nueva generación de tecnologías estructurales del vehículo centradas en el ser humano y basadas en estudios exhaustivos del comportamiento de las personas. Mazda las denomina Skyactiv-Vehicle Architecture y hacen la conducción más natural y menos estresante para todos. Conducir un automóvil exige tomar decisiones en fracciones de segundo y ejecutar acciones en línea con lo que ocurre a nuestro alrededor. Adicionalmente, el nuevo Mazda3 incorpora sofisticadas tecnologías de seguridad y soluciones de ergonomía pensadas para que todos los ocupantes disfruten de niveles de seguridad y confort nunca vistos. Con este coche, cualquiera puede sentir esa emoción al volante tan exclusiva de Mazda.

Mazda3, un coche para el cliente

En el interior también se aprecia el salto generacional y cambia completamente su diseño. Ahora gana horizontalidad gracias las formas de su salpicadero y la manera de integrar la nueva pantalla táctil de 8,8 pulgadas.

Ya en la consola central están unos controles de la climatización simplificados, mientras que la instrumentación cambia notablemente. La habitabilidad parece haber mejorado, aunque el maletero mantiene su capacidad de 364 litros.

Mazda3, un coche para el cliente

La revolución

El nuevo Mazda3 será el primer modelo de producción en montar el innovador motor Skyactiv-X de Mazda, una unidad de combustión con encendido por compresión controlado por chispa. El motor diésel 1.8 l. Skyactiv-D desarrolla 116 CV. Ofrece un consumo medio de 4,8-5,7 l/100 km, unas emisiones de CO2 de 130-151 g/km e incorpora un catalizador de almacenamiento de NOx (NSC) . El motor de gasolina 2.0 l. Skyactiv-G, de 122 CV, tiene un consumo medio de 6,0-6,7 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 136-152 g/km. Para mejorar estas cifras, un sistema de desactivación de cilindros alterna entre funcionamiento con dos y cuatro cilindros2.

Tanto el motor Skyactiv-X como el Skyactiv-G han adoptado el sistema M Hybrid de Mazda, consistente en una batería de ion litio de 24 V y 600 kJ, más un transformador DC/DC.

Mazda3, un coche para el cliente

El Mazda3 siempre se ha destacado por su conducción y en esta generación podrá seguir haciéndolo. El uso del coche sobre todo es muy intuitivo, la frenada destaca por su potencia y además es dosificable, y la dirección es un lo suficientemente rápida para hacerlo muy ágil, lo que, sumado a unas suspensiones bien plantadas, incrementa la sensación que comentábamos. La impresión general detrás del volante es su aplomo en cualquier circunstancia, teniendo la seguridad de tenerlo todo bajo control.

Valoración

Diseño

9

Habitabilidad

7

Comportamiento

9

Prestaciones

8

Confort

8

Equipamiento

8

Nota: 8.2

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