Una experiencia inolvidable

Todo empezó como un reto, que me lanzaba el amigo Teo Vega en el programa de Electric Car que dirige en Radio Las Palmas, ese reto se fue transformando poco a poco en una ilusión y gracias al apoyo de Renault España, Motor Arisa y BP El Taro pudimos llevar a cabo.

Además de los patrocinadores, Antonio y Aday Lujan (bicampeones de España en la categoría Híbridos) fueron los que nos enseñaron todo lo que debíamos saber de esta competición y, también se encargaron de preparar el Renault Arkana que íbamos a utilizar con las preceptivas sondas y nos cedían los aparatos necesarios para poder hacer una prueba de este tipo.

Para poder explicar bien, todo lo ocurrido en el Eco Rally de Madrid necesitaría el doble de este escrito, por lo que intentaré resumir lo más que me sea posible.

La prueba para nosotros empezaba el jueves, cuando recogíamos los coches (un Clio para los Lujan y el Arkana para nosotros, todos ellos híbridos) y dedicábamos muchas horas para colocar las sondas y decorar los coches. Para posteriormente dirigirnos a Torrejon de Ardoz, lugar donde tenía la cede el Eco Rally.

El viernes, empezaba el estrés de verdad. A primera hora había que calibrar los aparatos, que en un principio no había forma, pero la ayuda de los Lujan volvió a surtir efecto y logramos un calibre perfecto. Luego tocaba hacer un pequeño test para comprobar que todo estaba bien y funcionaba sin problema, algo que logramos sin problemas.

Luego llegaba el momento de la verificaciones técnicas, en donde encontrábamos a otro canario ilustre, como Alejandro González. Desde allí nos teníamos que dirigir a la Plaza de Colón en Madrid, donde iba a tener lugar la Ceremonia de Salida del Eco Rally de Madrid.

Ese momento de la salida fue muy emocionante, ya que nos había adjudicado el número 45 (los últimos de la lista de inscritos) y como la salida se realizó de atrás a delante, salimos los primeros. La verdad es que es algo que hay que vivir, los aplausos de los aficionados, los flases, las luces, la música, el speaker, por uno momentos nos sentimos importantes, por unos momentos.

Ya eran sobre las 19.00 horas, y teníamos que volver a Torrejón de Ardoz para repostar el coche en la gasolinera elegida por el organizador y era además donde nos precintaban la tapa del deposito y luego devolver los coches al parque cerrado.

El sábado, momento de la verdad

Arrancamos en el Eco Rally de Madrid para acometer los siete tramos de regularidad, con muchas dudas pero con muchas ganas. La primera sección estaba compuesta por cuatro tramos de regularidad, un parón de cuatro horas para recargar los vehículos eléctricos e híbridos enchufables y luego la segunda sección con tres tramos más en donde estaba el TR +.

En el primer tramo y como suele ser habitual, el rally nos puso en nuestro sitio en un cruce que no veíamos. Aunque volvíamos retomar el camino rápidamente, la regularidad no perdona y empezó a caernos encima con todo su peso. Pero logramos retomar los metros y el tiempo y “solo” nos caían 215,4 puntos, algo que nos caía como una loza, pero que no nos iba a desilusionar, habíamos venido a competir y pasarlo lo mejor posible.

En los tres siguientes tramos, las cosas nos fueron mucho mejor, consiguiendo un tercer puesto en el TR2 (19.1 puntos) un cuarto puesto en el TR3 (16.3 puntos) y otro tercer puesto en el TR4 (8 puntos)

Segunda sección de infarto, pero con premio

Después de comer y descansar unos minutos, comenzábamos la segunda sección. En principio todo bien, pero nos dimos cuenta que la Tablet sólo tenía un 40% de batería y al intentar conectarla al USB del coche no cargaba. “Venga va” arrancamos y ya veremos que hacemos. Pero aparecía otro problema más grave, la Tablet no marcaba la distancia, el Tripod (donde van conectadas las sondas de medición) no conectaba vía bluetooth y no había forma de solucionarlo (hicimos de todo) aún así salíamos.

Tengo que decir la verdad y en ese momento le comentaba a Teo que deberíamos abandonar por que sin la medición sería imposible seguir, a lo que el me dijo “de eso nada” y empezamos a buscar como llegar al primer tramo de la segunda sección. Y encontramos por el camino al vehículo que salía delante de nosotros y, nos pegamos a él para que nos sirviera de guía, de momento íbamos capeando el temporal.

A la llegada al control horario, hicimos lo único que nos faltaba por hacer con el tema de la conexión entre el Tripod y la Tablet, desconectamos todos y cada uno de los cables del Tripod, que estaba situando detrás del volante y no habíamos podido hacerlo en marcha. “Eureka” todo empezaba a funcionar otra vez. Y en otra frase para recordar del amigo Teo “las cosas pasan por algo, así que ahora nos saldrán las cosas mejor”. Que verdad.

Sólo nos quedaban tres tramos para finalizar la prueba, pero teníamos que hacerlo de noche, lloviendo y en un lugar desconocido para los dos, pero eso sí con muchas ganas y sobre todo con un objetivo, hacerlo lo mejor posible para dejar en buen lugar a nuestros patrocinadores, Renault España, Motor Arisa y BP El Taro.

La “única” incidencia en estos tres tramos es que en el segundo se nos cruzaba un ciervo en plena trazada, menudo susto. Tras el último tramo y después de todo los sufrido, no queríamos ver ni la clasificación y además los móviles se habían quedado sin cobertura, con lo que nos lo tomábamos con mucha calma.

La sorpresa saltaba a la llegada a meta, cuando nos encontrábamos a varios equipos felicitándonos por lo que habíamos hecho, imaginad nuestra cara de asombro y preguntábamos qué pasaba.

Salíamos rápidamente de dudas, habíamos ganado el TR+ entre los vehículos híbridos, un tramo en el que todos quieren ganar por que da puntos extra en la clasificación del Campeonato de España de Energías Alternativas, además un trofeo acreditativo.

Ya con los datos en la mano, verificamos que en el TR5 (12 puntos) repetíamos otro tercero y en en el TR6 (15,4 puntos) lográbamos la victoria y para rematar, en el TR7 (10,6 puntos) lográbamos la segunda posición.

Aunque en el computo total de la prueba fuimos séptimos de la general, al haber sido quintos en regularidad y séptimos en eficiencia.

Pero lo verdaderamente importante es que nuestro rivales nos felicitaran por nuestro trabajo, sin ninguna penalización en los controles horarios y una clara progresión que nos hizo ganar el TR+ de manera destacada, algo impensable cuando comenzábamos esta aventura.

Y volviendo al principio de este artículo, ya lo podemos decir, con la experiencia vivida, que los Eco Rallys son muy “intensos”. Además debemos poner en valor el trabajo de Toni y Aday Lujan, que sin ellos hubiera sido imposible salir en esta prueba y por supuesto las empresas que han creído en nosotros, como: Renault España, Motor Arisa y BP El Taro, que han permitido disfrutar de esta aventura.